Muere un brigadista en los incendios de León

La oleada de incendios que vive el norte de España se ha cobrado la primera víctima mortal, un brigadista que trabajaba en la extinción del incendio de Molinaferrera (León). El joven de 27 años murió al verse sorprendido por las llamas, a pesar de su experiencia en la extinción de incendios.

Imagen de dos bomberos en el incendio en Galicia (EFE)

Las comunidades más afectadas por estos incendios son Galicia, Asturias, Castilla y León. Según el Ministerio de Medio Ambiente, ayer continuaban activos 18 focos en la comunidad gallega, 30 en Asturias y 8 en Castilla y León. Un número que ha desbordado a los equipos antiincendios y a provocado que los ciudadanos de las localidades más afectadas, como Ourense, decidieran unirse a las labores de extinción por falta de medios. La mayoría de los incendios están comenzando a estar controlados pero otros, como el de Molinaferrera, siguen en máxima alerta.

La Xunta de Galicia ha informado que el 90% de los incendios han sido provocados y que en lo que llevamos de año se han quemado casi 10000 hectáreas en el territorio gallego. Cifras muy negativas si las unimos al total de España: en 2011 se han quemado un total de 51000 hectáreas, cifra similar a las del año anterior.

Vídeo de los incendios del norte de España


Esta situación extrema generalizada de incendios se debe, probablemente, a un setiembre muy cálido (no se vivía un setiembre tan caluroso desde los años 80) y que octubre está siendo seco y con elevadas temperaturas. Otro factor clave es la falta de precipitaciones que ha hecho que muchas reservas de agua estén al 60% de su capacidad. Esta falta de lluvia dificulta la extinción de los incendios y pone en alerta a otras comunidades ya que, por ejemplo, hay puntos de la cuenca del Ebro que no llueve desde la primavera del 2010.

La Agencia Estatal Meteorológica espera precipitaciones débiles en el norte, que ayudarán a frenar la propagación de los incendios y facilitar su extinción.